¿Alguna vez te has preguntado cómo es posible que el color de un producto se vea igual en diferentes materiales? ¿O cómo una empresa puede mantener la consistencia en su identidad de marca a través de diferentes formatos? La respuesta está en Pantone, una empresa que ha revolucionado la forma en que vemos y utilizamos los colores.
La historia de Pantone comienza en Nueva Jersey en 1956, cuando Lawrence Herbert, un joven químico recién graduado, se unió a una pequeña compañía de imágenes llamada Pantone como impresor a tiempo parcial. En ese entonces, la consistencia en los colores era un desafío, ya que todo se hacía a través del teléfono y era difícil transmitir los matices y tonalidades exactas.
Herbert, quien se convirtió en el cerebro detrás de Pantone, se dio cuenta de que esto era un problema que debía ser resuelto. En 1962, compró la compañía y tuvo una idea brillante: crear un sistema de color que permitiera reproducir los colores de manera consistente en diferentes materiales.
Así nació el sistema de color Pantone, que cuenta con más de 10.000 colores formulados de manera precisa. Estos colores se utilizan en todo, desde la identidad de marca de empresas hasta la impresión de productos y materiales.
Pantone no vende colores en sí, sino la garantía de consistencia. Su objetivo es que el color de un producto se vea igual, ya sea impreso en una tabla de billar o en un vaso de cerámica. Para lograr esto, Pantone utiliza un estricto control de calidad y herramientas como el espectrofotómetro, que compara el mismo color en diferentes superficies y genera un valor numérico basado en ese color.
Además de las guías de colores físicas, que son una parte importante de su negocio, Pantone también ofrece servicios de consultoría y licenciamiento, así como herramientas digitales para ayudar a las empresas a encontrar y utilizar los colores correctos.
La historia de Pantone es un ejemplo de cómo una idea innovadora puede transformar una industria. Gracias a su sistema de color, ahora podemos disfrutar de la consistencia en los colores que nos rodean, desde la caja azul de Tiffany hasta los Minions amarillos de Universal Studios.
Así que la próxima vez que veas un color vibrante y consistente, recuerda que detrás de él hay todo un proceso de formulación y control de calidad. Pantone ha demostrado que la consistencia en los colores es posible, y su legado continuará evolucionando en un mundo cada vez más digital.
¡Así que no tengas miedo de jugar con los colores y expresar tu creatividad! Pantone está aquí para asegurarse de que tus colores se vean exactamente como los imaginas, sin importar dónde los utilices.



