De acuerdo con una encuesta reciente del International Council of Shopping Centers (ICSC), el 71% de los consumidores estadounidenses planea ser más selectivo en sus compras navideñas debido a la preocupación por los aumentos de precios derivados de los aranceles comerciales.
El estudio, realizado entre más de 1,000 compradores, revela que casi dos tercios evitarán minoristas que incrementen significativamente sus precios, lo que podría redefinir el mapa del comercio minorista durante la temporada más importante del año.
En contraste, el 64% planea dedicar más tiempo a buscar promociones, y el 67% espera visitar más tiendas con el objetivo de encontrar mejores oportunidades.
Tendencia hacia las compras presenciales y el valor tangible
A pesar del auge digital, más del 90% de los consumidores planea realizar parte de sus compras en tiendas físicas, una tendencia liderada por las generaciones más jóvenes, que buscan experiencias tangibles, confianza en los productos y contacto directo con las marcas.
Las tiendas departamentales de descuento serán el principal destino para casi dos tercios de los encuestados, mientras que una cuarta parte continuará comprando en grandes almacenes tradicionales.
Esta preferencia muestra una revalorización del concepto de “valor real”, en un entorno donde los consumidores buscan equilibrar precio, calidad y experiencia.
Inflación y tecnología: la nueva dupla del consumidor informado
Las presiones inflacionarias siguen presentes. Según una encuesta de KPMG, 8 de cada 10 compradores creen que los aranceles aumentarán los precios durante la temporada navideña.
Ante ello, las herramientas digitales y la inteligencia artificial (IA) se consolidan como aliadas del consumidor moderno.
- El 56% de la Generación Z y el 62% de los millennials usan IA para investigar productos.
- Un tercio de los consumidores en general recurrirá a esta tecnología para comparar precios y encontrar ofertas personalizadas, según UserTesting.
Este cambio sugiere que la tecnología se ha convertido en el nuevo instinto de ahorro, ayudando a los compradores a tomar decisiones más estratégicas en un entorno de incertidumbre económica.
Resiliencia y cambios en la experiencia minorista
Pese a la cautela financiera, el espíritu navideño se mantiene firme.
“El consumidor sigue comprometido con sus tradiciones y planea comprar”, afirmó Tom McGee, presidente y director ejecutivo de ICSC. “Pero ahora exige experiencias memorables que justifiquen su gasto”.
Las cifras refuerzan la idea de un consumidor más emocionalmente conectado pero racionalmente exigente, lo que representa un reto para los minoristas: adaptar la experiencia de compra para mantener la lealtad.
Descuentos estables, competencia más fuerte
Aunque los compradores esperan rebajas más agresivas, los datos muestran lo contrario. Según Adobe Analytics, los minoristas ofrecerán descuentos de hasta el 28%, similares a los del año pasado.
Esto implica que las empresas deberán competir más por la atención que por el precio, destacando por servicio, conveniencia y confianza, factores decisivos para cerrar ventas en un entorno saturado de opciones.
Oportunidades para pequeños empresarios y emprendedores
Para los negocios locales, esta tendencia es una oportunidad para conectar con consumidores que buscan autenticidad y valor.
Algunas estrategias clave que pueden aplicar:
- Ofrecer descuentos personalizados o beneficios adicionales para clientes recurrentes.
- Aprovechar la IA y redes sociales para mostrar productos de manera más emocional y segmentada.
- Crear experiencias de compra más humanas, destacando cercanía y servicio personal.
El consumidor actual busca marcas con propósito y transparencia, valores que los pequeños empresarios pueden capitalizar mejor que las grandes cadenas.
Una temporada de consumo consciente
La temporada navideña de 2025 se perfila como un reflejo de la nueva era del consumo: más inteligente, más emocional y más digital.
Los compradores no solo buscan ahorrar, sino sentirse parte de una experiencia con sentido.
Para los minoristas, el reto será adaptarse a esta mentalidad —no solo vendiendo productos, sino construyendo relaciones de confianza y valor real.
Vía Retail Dive



