Guess, la icónica marca estadounidense de jeans fundada en 1981, busca recuperar el brillo que la volvió mundialmente famosa en la década de los 90, cuando sus provocativas campañas con top models marcaron una época.
La compañía, liderada ahora por la tercera generación de la familia Marciano, enfrenta el desafío de reinventarse y conectar con las nuevas generaciones en una industria radicalmente distinta, dominada por cadenas de fast fashion como Zara y H&M, y por la venta online.
Apuesta por potenciar la división Guess Jeans
Bajo el liderazgo de Nicolai Marciano, hijo del fundador Paul Marciano, la firma apuesta por fortalecer y expandir globalmente su división Guess Jeans, enfocada exclusivamente en jeans y ropa casual.
La idea es posicionar Guess Jeans como una marca joven, fresca y asequible, aprovechando el conocimiento y la experiencia de la empresa en el diseño, fabricación y comercialización de jeans, su categoría más icónica.
Crecimiento en mercados emergentes como México
Parte de la estrategia contempla un fuerte crecimiento en mercados emergentes como México, donde planean iniciar con corners en tiendas departamentales, para luego abrir locales propios y reforzar las ventas online.
Según Marciano, ven una gran oportunidad en países como México donde las tendencias de moda se adoptan rápidamente, especialmente entre los millennials y la Generación Z.
La competencia también se mueve
Mientras Guess apuesta por los jeans, marcas competidoras como Benetton y Levi’s también realizan ajustes para enfrentar un mercado más desafiante. Benetton cerrará tiendas no rentables y Levi’s busca potenciar su marca insignia, luego de resultados mixtos con otras etiquetas.
Uno de los principales retos, explica Nicolai Marciano, es cambiar la percepción que se tiene de Guess luego de 45 años de trayectoria. La idea es que los consumidores, especialmente los más jóvenes, vean a la marca con una nueva perspectiva.
Con su enfoque en Guess Jeans, expansión global y énfasis en lo digital, la icónica marca busca reconectar con el público y demostrar que su brillo va más allá de los años 90.
Vía Expansión



