En su reunión del 6 y 7 de mayo de 2025, los funcionarios de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) reconocieron que podrían enfrentar una disyuntiva compleja en los próximos meses: combatir una inflación persistente o apoyar el empleo ante una posible desaceleración económica.
Las actas de esa sesión, publicadas el 28 de mayo, revelan un clima de incertidumbre económica creciente provocado por la volatilidad del mercado y las políticas comerciales de la administración Trump.
Con cautela ante un escenario inestable por aranceles y volatilidad financiera
Los participantes del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) discutieron ampliamente los riesgos que suponen los aranceles propuestos por Trump, incluyendo uno del 145% sobre productos importados de China, que inicialmente hicieron subir los rendimientos de los bonos y generaron temores de recesión.
Aunque estos aranceles se pospusieron una semana después de la reunión, la Fed decidió mantener las tasas de interés entre 4,25% y 4,5% mientras espera claridad en el panorama económico. La volatilidad en los mercados de bonos también fue señalada como una amenaza para la estabilidad financiera y para el estatus del dólar como refugio seguro.
La reunión clave fue a inicios de mayo, y las decisiones finales llegarán en junio
La reunión del FOMC se llevó a cabo los días 6 y 7 de mayo de 2025, en un momento donde la incertidumbre sobre las políticas comerciales era máxima. Desde entonces, algunos riesgos inmediatos se moderaron, pero la amenaza inflacionaria y el desempleo siguen latentes.
La próxima reunión será el 17 y 18 de junio, cuando la Fed presentará nuevas proyecciones sobre inflación, empleo y tasas de interés. En marzo, se esperaba que ocurrieran dos recortes de tasas en 2025, pero esta expectativa podría cambiar según los nuevos datos y las decisiones de la Casa Blanca.
El informe interno de la Fed proyecta que la inflación se mantendrá marcadamente alta durante 2025, mientras que el mercado laboral se debilitará, con un desempleo por encima del 4,6%, considerado el nivel sostenible para mantener una inflación del 2%. En abril, el desempleo ya había subido al 4,2%.
Las señales económicas indican que Estados Unidos está en una encrucijada, donde el impacto de los aranceles y la incertidumbre política podrían definir el rumbo económico del país en los próximos años.
La Fed se encuentra atrapada entre dos caminos complejos: aumentar las tasas para controlar la inflación o reducirlas para estimular el empleo. Esta dualidad nunca es fácil, pero menos aún en un entorno incierto, con políticas fiscales en evolución y tensiones comerciales en juego.
Los aranceles todavía no han sido retirados oficialmente; solo están en suspenso hasta julio. Esta situación deja a la Fed y al sector empresarial en la oscuridad sobre el futuro económico inmediato, algo que limita la capacidad de planificación y decisión.
Para prepararse ante posibles cambios en la política económica y financiera
Para inversionistas, empresarios y ciudadanos en general, entender estas señales de la Fed permite anticiparse a movimientos futuros en los mercados y en las políticas económicas. Con la posibilidad de recortes o ajustes de tasas en juego, y con un entorno internacional tenso, la toma de decisiones informadas es más importante que nunca.
La Fed llama a la cautela, pero también a la preparación. En momentos de incertidumbre, la mejor herramienta es el conocimiento.
Cuando el panorama se nubla y las decisiones pesan más que nunca, la resiliencia financiera nace de la información clara y oportuna. La Fed navega entre presiones inflacionarias y sociales, pero tú puedes navegar con inteligencia. Porque, al final, la preparación siempre supera la predicción.



